Teniamos muchas ganas de visitar este lugar que para muchos amigos era el mejor asador de Lanzarote. El lugar es bonito por fuera, por dentro tipico espacio de asador que no destacaba mucho por su decoracion pero correcto. Pero luego pedimos nuestras carnes a un personal muy profesional y una vez tomada la comanda salio el jefe de cocina con varios cortes de los que pedimos pero de diferente maduracion explicandonos bien cada uno. Ahi nos dimos cuenta que esto era un sitio muy serio y efectivamente lo fue. Los entrantes influenciados por la nouvelle cuisine estaban bien pero la carne, un chuleton de cebon de 90 dias de maduracion estuvo sublime.